sábado, noviembre 17

Lenguaje Popular Colombiano

Lenguaje popular es aquel que es usado por el hombre común y que presenta giros algo distorsionados  es decir no ajustado a las reglas aceptadas comúnmente  expresados con ingenuidad entre algunos hablantes. Cada país tiene su particularidad, incluso su propia interpretación.


En Colombia hay una gran variedad de palabras adaptadas que usamos para comunicarnos o mencionar algún objeto, Ejm:


En este vídeo encontraras una frase hablada en varios acentos Colombianos, pero fíjate en las terminaciones de las frases y encontraras esas palabras que identifican un lenguaje popular propio de cada región.









REVUELTO................ Conjunto de papas, yucas, plátanos, arracachas con que se hace el sancocho....."Traiga el revuelto para el almuerzo".

REZAR................. Orar a Dios – Embrujar – Curar ciertas enfermedades a punta de brujerías....."A ese tipo lo tiene rezao una pitoniza".

ROCHELA............ Burla – algaraza – Juego bullicioso......"Los niños viven en completa rochela".

RODAO..................... Borracho – Amanecer en la calle bebiendo....."Sabrá el Diablo donde amaneció rodao".

RONCIAR.................... Hacer pereza – Dilatar la terminación de una obra......"Se la pasa ronciando por todo el camino".

ROÑA........................ Desaseo – Mugre que se forma en la piel por falta de baño....."Hay que echarle lija para sacarle la roña".

RUNRUNES............... Rumores sobre algo........“Hay runrunes de que se va el vecino”.

RUÑIR................... Raer – Limpiar con los dientes – Haraposo......"En el sancocho va un huesito para que se lo ruña".


SABIONDO..........Inteligente - Estudiado....."Ese muchacho llega lejos porque es muy sabiondo".

SAL……………Mala suerte. ......"Estoy tan salao que si me apunto a la rifa de un revólver de seguro me gano un balazo".

SANCOHO...............Comida preparada con raices y tubérculos y diferentes carnes....."Para hoy tenemos sancocho de res y gallina".

SANTURRÓN.........Persona que aparenta ser muy religiosa........"Ese santurrón de mi vecino lo pillé manosiando a la sirvienta".

SAPIAR............... Delatar – Señalar – Acusar......."Está en la cárcel porque lo sapiaron”.

SAPO................ Delator – Acusador – Metido......"Recuerde que los sapos mueren estripados".

SEBO.................. Poner sebo ….Molestar - Fastidiar – Grasa....."Desde que llega pone sebo".

Historietas Colombianas

La historieta o cómic colombiano, popularmente conocida como caricaturas, monos o monachos, carece de una tradición continuada a lo largo del tiempo, de tal manera que su desarrollo ha sido intermitente. Daniel Rabanal justifica la pobreza de la historieta colombiana por:

--La inexistencia de un público potencial para las mismas, debido al tardío desarrollo de una cultura urbana, que vino a coincidir en el tiempo con la extensión de la TV.

--La falta de apoyo institucional.

--El menor coste del material importado.


Existen miles de personas en Colombia que ha diario hacen historietas como estas:

En la siguiente pagina podrás encontrar un museo virtual de historietas cómicas de Colombia:




Televisión colombiana

La televisión es un sistema para la transmisión y recepción de imágenes en movimiento y sonido a distancia que emplea un mecanismo de difusión. La transmisión puede ser efectuada mediante ondas de radio, por redes de televisión por cable, Televisión por satélite o IPTV. El receptor de las señales es el televisor.






La televisión es uno de los principales medios de comunicación masivos de Colombia. Fundada el 13 de junio 1954 por josé alejandro peñuala galindo , se ha caracterizado históricamente por sus altos índices de consumo por parte de la población nacional, ocupando un espacio importante en la vida de los ciudadanos. En la actualidad se calcula que más del 95% de los hogares posee al menos un televisor en su hogar y más del 70% de los Colombianos acostumbre ver al menos una hora diaria de programación.

Las modalidades autorizadas por la Comisión Nacional de Televisión (Máximo órgano regulador del servicio en el país) (ahora Autoridad Nacional de Televisión ANTV) son: nacionales, regionales, locales, por suscripción y DTH, los canales pueden ser de capital privado y público, como:








Sabiduría Popular Colombiana


La sabiduría popular es la colección de dichos, enseñanzas, recetas y remedios, que nacen de la experiencia repetida de las personas y se transmiten de generación en generación, formando parte de la memoria de los pueblos.



Hoy en día se toma como algo divertido, no como instrumento de valor, para conocer aspectos de la mentalidad colectiva de épocas pasadas y presentes. La filosofía lo ha tomado como una respuesta a las inquietudes e ideas de la sociedad de cada tiempo, sociedad con una sabiduría previa y compartida a través de las costumbres. La sabiduría popular de cada momento puede mantener diversas relaciones sociales y culturales, en palabras de Leonardo da Vinci “la sabiduría es hija de la experiencia”; además, permite inferir ideas y conceptos. El texto coloquial está cargado de hechos psicosociales y culturales que puede resultar incoherente o irrelevante para lectores desprovistos de informaciones previas; por ser a la vez referencial, objetivo y subjetivo, directo e indirecto, su comprensión e interpretación demanda conocimiento del contexto en que fue construido.
Hay cantidad de refranes que se interpretan y se discuten de diversas maneras, se pueden relacionar con la filosofía, la naturaleza y el clima, desde la inteligencia emocional como en “Dime con quién andas y te diré quién eres”, que hace referencia a las amistades buenas o malas y cómo éstas influyen en el comportamiento del destinatario, por lo que recomienda que cada persona busque sus amistades y compañía. La sociedad incorpora a la vida cotidiana los aportes de científicos, artistas y filosóficos. Un pueblo se retrata en sus refranes que acumula un pasado y un presente, muestra una forma de ver el mundo, han nacido en todos los tiempos y culturas, son sentencias cargadas de ironía y metáfora. A veces una dura realidad, otras veces, un consuelo y, casi siempre, una verdad divertida que simboliza la identidad de los pueblos.

martes, noviembre 13

Neologismos Colombianos

Palabra o expresión nueva que se crea en una lengua, o acepción nueva que toma una que ya existía. Se creación obedece a la necesidad de dar nombre a objetos o conceptos nuevos, debidos al avance de la técnica, la cultura, la política, etc. Los métodos para la formación de neologismos son variados, composición, derivación, préstamo, etc. Son ejemplos de neologismos: hipertexto, chequear, cederrón, disco duro, etc.


Clasificación de los neologismos 


Neología de forma:
son palabras creadas a partir de cambios morfológicos de vocablos ya existentes en la propia lengua: por ejemplo, aeronave se forma de la unión de aéreo más nave; teledirigido se forma de la unión de tele y dirigido.
Neología de sentido: son palabras nuevas a partir de vocablos ya existentes en la propia lengua que sufren cambios semánticos o de significado: por ejemplo tío (un pariente que resulta ser el hermano de alguno de los propios padres) se transforma en cualquier expresión para llamar la atención de la otra persona, como chico u hombre; camello que es un animal, también puede ser un traficante de drogas.
Extranjerismos.
Barbarismo.


Cínico (a): Persona que trasgrede las leyes colombianas con plena consciencia de que su proceder es un delito, y, posteriormente, cuando se ve descubierta y a punto de ser «empapelada judicialmente», niega ante la prensa que haya sido autora de tales violaciones.

Hipócrita: Adjetivo. Individuo semejante al cínico. Este se oculta, y enmudece ante la opinión pública; en secreto, se auto-proclama «ciudadano de bien», aunque todos sepan que es bien torcida su conducta.

lunes, noviembre 12

Cuento literario Colombiano




Es el cuento concebido y transmitido mediante la escritura. El autor suele ser conocido. El texto, fijado por escrito, se presenta generalmente en una sola versión, sin el juego de variantes característico del cuento popular.






Los hombres que están de más 



Cuento. Texto completo
Anton Chejov

Son las siete de la noche. Un día caluroso del mes de junio. Del apeadero de Hilkobo, una multitud de personas que ha llegado en el tren se encamina a la estación veraniega. Casi todos los viajeros son padres de familia, cargados de paquetes, carpetas y sombrereras. Todos tienen aspecto cansado, hambriento y aburrido, como si para ellos no resplandeciera el sol y no creciera la hierba.
Entre los demás anda también Davel Ivanovitch Zaikin, miembro del Tribunal del distrito, hombre alto y delgado, provisto de un abrigo barato y de una gorra desteñida.
-¿Vuelve usted todos los días a su casa? -le pregunta un veraneante, que viste pantalón rojo.
-No; mi mujer y mi hijo viven aquí, y yo vengo solamente dos veces a la semana -le contesta Zaikin con acento lúgubre-. Mis ocupaciones me impiden venir todos los días y, además, el viaje me resulta caro.
-Tiene usted razón; es muy caro -suspira el de los pantalones rojos-. No puede uno venir de la ciudad a pie, hace falta un coche; el billete cuesta cuarenta y dos céntimos...; en el camino compra uno el periódico, toma una copita... Todo son gastos pequeños, cosa de nada, pero al final del verano suben a unos doscientos rublos. Es verdad que la Naturaleza cuesta más; no lo dudo,... los idilios y el resto, pero con nuestro sueldo de empleados, cada céntimo tiene su valor. Gasta uno sin hacer caso de algunos céntimos y luego no duerme en toda la noche... Sí... Yo, señor mío, aunque no tengo el gusto de conocer su nombre y apellido, puedo decirle que percibo un sueldo de dos mil rublos al año, tengo categoría de consejero y, a pesar de esto, no puedo fumar otro tabaco que el de segunda calidad, y no me sobra un rublo para comprarme una botella de agua de Vichy, que me receta el médico contra los cálculos de la vejiga.
-En efecto; todo está mal -dice Zaikin después de una pequeña meditación-. ¿Quiere saber usted mi opinión? El veraneo ha sido inventado por las mujeres y el diablo. Al diablo lo guiaba su maldad y a las mujeres su ligereza. ¡Usted comprenderá que esto no es una vida! ¡Esto es un presidio! Hace calor, está uno sofocado, respira con dificultad y, no obstante, tiene que zarandearse como un alma en pena y carecer casi de albergue. Allá en la ciudad no quedan ni muebles ni servidumbre... Todo se lo llevaron al campo... Hay que alimentarse pésimamente. Imposible tomar el té, porque no se encuentra quién encienda el samovar. Yo no me lavo. Vengo aquí, al seno de la Naturaleza, y me cabe el gusto de andar a pie con este calor... ¡Una porquería! ¿Está usted casado?
-Sí... Tengo tres hijos... -responde el del pantalón rojo.
-¡Abominable!... Es asombroso. Parece increíble que aun estemos vivos.
Al fin, los veraneantes llegan hasta la aldea. Zaikin se despide del de los pantalones rojos y entra en su casa, donde reina un silencio mortal. Se oye solamente el zumbido de las moscas y de los mosquitos.
Delante de las ventanas cuelgan visillos de tul, ante los cuales se ven macetas con flores marchitas. En las paredes, de madera, al lado de las oleografías, dormitan las moscas. En la antesala, en la cocina, en el comedor, no hay alma viviente.
En la habitación, que sirve al mismo tiempo de sala y de recibidor, Zaikin encuentra a su hijo Petia, chicuelo de seis años. Petia está muy absorto en su trabajo. Recorta la sota de un naipe, avanza el labio inferior y sopla.
-¿Eres tú, papá? -le dice sin volver la cabeza-. ¡Buenos días!
-¡Buenos días!... ¿Dónde está tu madre?
-¿Mamá? Ha ido con Olga Cirilovna a un ensayo. Habrá representación pasado mañana. Me llevarán a mí también... ¿Y tú, irás?
-Hum... ¿No sabes cuándo volverá tu madre?
-Dijo que volvería al ser de noche.
-Y Natalia, ¿dónde está?
-Mamá se la llevó para que le ayudara a vestirse en los entreactos, y Alculina se fue a buscar setas al bosque. Papá, ¿por qué cuando los mosquitos pican, el vientre se les pone encarnado?
-No sé... Porque chupan la sangre. ¿De modo que no hay nadie en casa?
-Nadie. Yo sólo estoy en casa.
Zaikin se sienta en una butaca y mira como atontado por la ventana.
Transcurren algunos momentos.
-¿Quién nos servirá la comida? -pregunta.
-Hoy no han hecho comida. Mamá pensó que tú no vendrías y dispuso que no se guisara. Ella comerá con Olga Cirilovna después del ensayo.
-Muchas gracias. Y tú, ¿qué has comido?
-Tomé leche. Me compraron seis céntimos de leche. Papá, ¿por qué chupan la sangre los mosquitos?
Zaikin siente una pesadez que le encoge el hígado y lo aprieta.
Experimenta tal amargura y tal ofensa que quisiera saltar, tirar algo al suelo, gritar, reñir. Pero recordando que los médicos le prohibieron toda agitación hace un esfuerzo, y para calmarse se levanta silbando un aire de Los Hugonotes.
-Papá; ¿tú sabes...? -insiste Petia.
-¡Déjame en paz con tus tonterías! -responde Zaikin enfadado-. Me fastidias. Tienes seis años y eres siempre tan majadero como cuando tenías tres. ¡Eres un chiquillo tonto y malcriado! ¿Por qué estropeas los naipes? ¿Cómo te atreves a estropearlos?
-¡Estos naipes no son tuyos! Es Natalia la que me los dio -replica Petia sin levantar la vista.
-¡Mientes! ¡Mientes, mal muchacho! -exclama Zaikin-. Tú mientes siempre. ¡Hay que darte una paliza, gaznápiro! ¡Te arrancaré las orejas!
Petia salta, alarga el cuello y mira fijamente la cara purpúrea e irritada de su padre.
Sus grandes ojos están muy abiertos, luego se llenan de lágrimas y su boca se tuerce.
-¿Por qué me riñes? -chilla con voz aguda-. ¿Por qué me fastidias? ¡Estúpido! No hago nada malo, no soy travieso, obedezco lo que me ordenan y tú todavía gritas. Di, ¿por qué me riñes?
El niño habla con tanta convicción y llora tan amargamente que Zaikin se avergüenza.
-Tiene razón -piensa-; le busco las cosquillas. ¡Basta!... ¡Basta! -le dice golpeándolo en el hombro-. Anda, Petia, yo tengo la culpa; dispénsame. Tú eres un buen chico y te quiero mucho.
Petia se enjuga los ojos con la manga, vuelve a sentarse en su sitio y, con un suspiro, reanuda su tarea de recortar la sota. Zaikin se marcha a su gabinete, se extiende en el sofá y, colocándose las manos debajo de la cabeza, se pone a reflexionar. Las lágrimas del niño calmaron sus nervios, y el hígado se le alivió también. Pero el hambre y el cansancio lo acosan.
-¡Papá! -dice Petia detrás de la puerta-. ¿Quieres ver mi colección de insectos?
-Sí, tráela.
Petia entra y enseña a su padre una larga cajita verde. Zaikin oye de lejos un zumbido desesperado y el rascar de las patitas sobre las paredes de la caja.
Al levantar la tapadera ve una multitud de mariposas, escarabajos, grillos y moscas clavadas en el fondo con alfileres. Todos, a excepción de dos o tres mariposas, están vivos y se mueven.
-El grillo vive aun -dice con asombro Petia-; ayer lo cogimos y hasta ahora no se ha muerto.
-¿Quién te enseñó a clavarlos así? -le interroga Zaikin.
-Olga Cirilovna.
-Si la clavasen a ella misma así, ¿qué tal le parecería? -añade Zaikin con repugnancia-. ¡Llévatelos! ¡Es vergonzoso martirizar así a los animales! ¡Dios mío, qué mal criado está! -piensa cuando Petia desaparece.
Povel Matreievitch olvida su cansancio y hambre y no piensa sino en el porvenir de su hijo. Entretanto, la luz del día va extinguiéndose poco a poco...; se oye cómo los veraneantes tornan de los baños por grupos.
Alguien se para delante de la ventana abierta del comedor y grita:
-¿Desea usted setas?
Al cabo de un rato, no habiendo recibido contestación, se advierte el rumor de pies descalzos que se alejan... Por fin, cuando la oscuridad es casi completa y por la ventana entra el fresco de la noche, la puerta se abre ruidosamente y se oyen pasos apresurados, voces y risas...
-¡Mamá! -exclama Petia.
Zaikin mira desde su gabinete y ve a su mujer. Nodejda Steparovna está como siempre, sonrosada, rebosando salud... La acompaña Olga Cirilovna -una rubia seca, con la cara cubierta de pecas- y dos caballeros desconocidos: uno joven, largo, con cabellos rojos rizados y la nuez muy saliente; el otro, bajito, rechoncho, con la cara afeitada.
-Natalia, ¡encienda el samovar! -grita Nodejda Steparovna-. Parece que Povel Matreievitch ha llegado. Pablo, ¿dónde estás? ¡Buenos días, Pablo! -grita de nuevo. Entra corriendo en el gabinete-. ¿Has venido? ¡Me alegro mucho! Tengo conmigo dos de nuestros artistas aficionados... Ven, te voy a presentar. Aquél, el más alto, es Koromislof; tiene una voz magnífica; y el otro, el bajito, es un tal Smerkolof, un verdadero artista; declama que es una maravilla. ¡Ah, qué cansada estoy! Fui al ensayo... Todo está perfecto... Representaremos El huésped con el trombón y Ella le espera... Pasado mañana tendrá lugar el espectáculo.
-¿Para qué los has traído? -pregunta Zaikin.
-¡Era indispensable, lorito! Después del té hemos de repetir los papeles y cantar alguna que otra cosa. Tendremos que cantar un dúo con Koromislof... ¡No faltaría más sino que lo olvidara! Di a Natalia que traiga aguardiente, sardinas, queso y algo más. Seguramente se quedarán a cenar... ¡Qué cansada estoy!
-¡Cáspita!... El caso es que no tengo dinero.
-¡Imposible, lorito! ¡Qué vergüenza! ¡No me hagas ruborizar!
Media hora más tarde Natalia sale a comprar aguardiente y entremeses.
Zaikin, después de haber tomado el té y comido un pan entero, se va al dormitorio y se acuesta. Nodejda Steparovna, con risas y algazaras, empieza a ensayar sus papeles. Povel Matreievitch escucha largo rato la lectura gangosa de Koromislof y las exclamaciones patéticas de Smerkolof.
A la lectura sigue una conversación larga, interrumpida a cada momento por la risa chillona de Olga Cirilovna. Smerkolof, aprovechando su fama de actor, explica con aplomo los papeles. Luego se oye el dúo, y más tarde, el ruido de vajilla... Zaikin, medio dormido, oye cómo tratan de convencer a Smerkolof para que declame "La pecadora", y después de hacerse rogar mucho, consiente, y declama golpeándose en el pecho, llorando y riendo a la vez... Zaikin se acurruca y esconde la cabeza bajo las sábanas para no oír.
-Tienen ustedes que andar lejos para volver a su casa -observa Nodejda Steparovna-. ¿Por qué no pernoctan aquí? Koromislof dormirá en el sofá y usted, Smerkolof, en la cama de Petia... A Petia lo ponemos en el gabinete de mi marido... ¿Verdad? ¡Quédense ustedes!
Cuando el reloj da las dos todo queda silencioso... La puerta del dormitorio se abre y aparece Nodejda Steparovna.
-¡Pablo! ¿Duermes? -dice en voz baja.
-No. ¿Qué quieres?
-Ven, querido mío; acuéstate en el sofá, en tu gabinete; en tu cama se acostará Olga Cirilovna. La hubiera puesto a ella en el gabinete; pero tiene miedo de dormir sola. ¡Anda, levántate!
Zaikin se incorpora, viste la bata, y cogiendo su almohada se dirige hacia su gabinete... Al llegar a tientas hasta el sofá enciendo un fósforo y ve que en el diván está Petia. El niño no duerme, y fija sus grandes ojos en el fósforo.
-Papá, ¿por qué los mosquitos no duermen de noche?
-Porque..., porque... -murmura Zaikin- porque nosotros, tú y yo, estamos aquí de más...; no tenemos ni dónde dormir.
-Papá, ¿y por qué Olga Cirilovna tiene pecas en la cara?
-¡Déjame; me fastidias!
Zaikin reflexiona un poco, y luego se viste y sale a la calle a tomar el fresco... Mira el cielo gris de la madrugada, contempla las nubes inmóviles, oye el grito perezoso del rascón, y empieza a imaginarse lo bien que estará cuando vuelva a la ciudad, y, terminadas sus tareas en el Tribunal, se eche a dormir en su casa solitaria...
De repente, al volver de una esquina, aparece una figura humana.
«Seguramente el guardián», piensa Zaikin.
Pero, al fijarse, reconoce al veraneante del pantalón rojo.
-¡Cómo, no duerme usted? -le pregunta.
-No puedo -suspira el del pantalón rojo-. Disfruto de la Naturaleza... Tenemos huéspedes; en el tren de la noche ha llegado mi suegra..., y con ella mis sobrinas..., jóvenes muy agraciadas. Estoy muy satisfecho..., muy contento..., a pesar de... de que hay mucha humedad...
¿Y usted también, disfruta de la Naturaleza?
-Sí... -balbucea Zaikin-. Yo también disfruto de la Naturaleza... ¿No conoce usted, aquí, en la vecindad, algún restaurante o tabernita?
El de los pantalones rojos levanta los ojos hacia el cielo y se queda reflexionando.
FIN

domingo, noviembre 4

Cuento Popular Colombiano

Es una narración tradicional de hechos ficticios que se presenta en múltiples versiones, que coinciden en la estructura pero difieren en los detalles. Tiene 3 subtipos: los cuentos de hadas , los cuentos de animales y los cuentos de costumbres.



Cuento popular : El Hada fea

Había una vez una aprendiz de hada madrina que era mágica y maravillosa, y la más lista y amable de las hadas, pero también era un hada muy fea, y por mucho que se esforzaba en mostrar sus muchas cualidades, parecía que todos estaban empeñados en que lo más importante de una hada tenía que ser su belleza.
En la escuela de hadas no le hacían caso, y cada vez que volaba a una misión para ayudar a un niño o cualquier otra persona en apuros, antes de poder abrir la boca, ya le estaban gritando:

- ¡Fea!, ¡Bicho!, ?Lárgate de aquí!

Aunque pequeña, su magia era muy poderosa, y más de una vez había pensado hacer un encantamiento para volverse bella; pero luego pensaba en lo que le contaba su mamá de pequeña: “Tú eres como eres, con cada uno de tus granos y tus arrugas; y seguro que es así por alguna razón especial...”

Pero un día, las brujas del pa?s vecino arrasaron el pa?s, haciendo prisioneras a todas las hadas y magos.
Nuestra hada, poco antes de ser atacada, hechizó sus propios vestidos, y ayudada por su fea cara, se hizo pasar por bruja.
Así, pudo seguirlas hasta su guarida, y una vez allí, con su magia preparó una gran fiesta para todas, adornando la cueva con murciélagos, sapos y arañas, y música de lobos aullando.

Durante la fiesta, corrió a liberar a todas las hadas y magos, que con un gran hechizo consiguieron encerrar a todas las brujas en la montaña durante los siguientes 100 años.

Y durante esos 100 años, y muchos más, todos recordaron la valentía y la inteligencia del hada fea.
Nunca más se volvió a considerar en aquel país la fealdad una desgracia, y cada vez que nacía alguien feo, todos se llenaban de alegría sabiendo que tendría grandes cosas por hacer.

Enseñanza: “Todos podemos conseguir grandes cosas, y tenemos en nosotros lo necesario para conseguirlas. No debemos darle importancia a la belleza exterior, y querer cambiar sólo por cómo nos vean los demás.” FIN

Autor: Pedro Pablo Sacristan

lunes, octubre 29

Refranes Colombianos

Los refranes son dichos de origen popular, que de manera figurada y pintoresca suelen encerrar enseñanzas morales de gran sabiduría. 




  • A grandes males, grandes remedios
  • Con la vara que midieras, seras medido
  • Donde las dan, las toman
  • El que a hierro mata, a hierro muere
  • La conciencia es a la vez, testigo, fiscal y juez
  • La costumbre hace la ley
  • La justicia cojea pero al fin llega
  • Ojo por ojo, diente por diente
  • Cuanto mas viejo mas pendejo 
  • Del vivo vive el bobo
  • De noche todos los gatos son pardos
  • A palabras necias oídos sordos
  • A los pendejos ni Dios los quiere


Coplas Colombianas




La copla es una forma poética que sirve para la letra de canciones populares. Surgió en España en el siglo XVIII, donde sigue siendo muy común, y está muy difundida en Latino-américa. Las coplas están compuestas generalmente por cuatro estrofas que tienen versos de arte menor.



La gallina puso un huevo
pero lo puso movido,
de tanto bailar bambuco
con el gallo amanecido.

Los muchachos de otros tiempos
trabajaban por mujer,
los muchachos de estos tiempos
buscan una que les dé.

Ay del pobre que se casa
con una mujer blanquita,
que a la vuelta de la iglesia
viene un blanco y se la quita.



Ay quien fuera zapatico
para tu bonito pie,
y mirar con los dos ojos
lo que el zapatico ve!

El amor y el interés
se fueron al campo un día
y más pudo el interés
que el amor que te tenía.

Las avecillas del cielo
se mantienen con mosquitos,
así me mantengo yo
con abrazos y besitos.

La bala que a mi me hirió
también hirió al comandante,
a él lo hicieron capitán
y a mí soldado como antes!

La caña con ser la caña,
también tiene su dolor:
si la meten al trapiche
le parten el corazón.

lunes, octubre 22

Proverbios colombianos

                        PROVERBIOS             COLOMBIANOS

Un proverbio es una frase corta con un enunciado sentencioso, en el cual se expresa un pensamiento con contenido moral un consejo o una enseñanza.

  • El paìs se durrumba y yo de rumba
  • Papaya partida,papaya comida
  • Las leyes son para los de ruana
  • Meten gato por liebre
  • Perro viejo. ladra echado
  • Quien con niños se acuesta, amanece mojado
  • A buen hambre, no hay pan duro
  • ¿ a cómo?, !a mil¡
  •  
  • Si mi tia tubiera barba, seria mi tio
  • Más apretado, que calzón de loca
  • Tiene más culo un gato empinado¡¡ 
  •  Mas ordinario que una paleta de mondongo
  •  Mas ordinario que yogourt de Yuca
  • Mas ordinario que morcilla con centro de arequipe



jueves, octubre 4

Dichos populares Colombianos

¿QUE ES UN DICHO? un dicho es una frase hecha, es un conjunto de palabras con que se da a expresar algo que no coinciden con el sentido general de las mismas.


Nanay Cucas: De ninguna manera.

Ñapa: Añadidura, vendaje, valor agregado.


Ñoco: Miembro mutilado.

Ñor: Señor, Don.

Ojón: Individuo de grandes ojos.
Pucho: Pequeña porción.

Quereme: Afrodisíaco, alimento o bebida con sustancia afrodisíaca.

Rasca: Borrachera

Regodiento: Desganado para comer.

Tacar burro: Equivocarse, errar en el juego de billar.

Vendí la lora por no cargarla: Dicho a quien recuesta el brazo o el cuerpo en otra persona.

Zurumbático: Aturdido, lelo, tonto.

amà: mamà
: papà

cochambre: persona con mal comportamiento

cubita o raspa: el menor de los hijos

mocoso: dicho para hacerle saber que hizo algo mal